El Circuito de las Cuatro Lagunas está ubicado en la provincia de Acomayo, específicamente en el distrito de Pomacanchi, a unos 107 km de la ciudad de Cusco, lo que equivale a unas 2 horas en automóvil. Este circuito turístico ha sido creado gracias al esfuerzo conjunto de alrededor de 40 comunidades locales de la zona.
Las famosas lagunas que conforman este circuito son un verdadero tesoro natural y cultural. Las comunidades locales ofrecen servicios de guía turístico, hospedaje y deliciosa comida para los visitantes, lo que hace que la experiencia sea aún más enriquecedora y auténtica.
Con este circuito, los turistas tienen la oportunidad de apreciar la belleza escénica de las cuatro lagunas, mientras contribuyen al desarrollo sostenible de las comunidades locales. El Circuito de las Cuatro Lagunas es una muestra de cómo el turismo responsable puede beneficiar tanto a los viajeros como a las comunidades anfitrionas.
Esta laguna es conocida por su peculiar forma en el mapa, que se asemeja a un corazón, lo que le ha otorgado un encanto especial entre los visitantes. Sus aguas tranquilas reflejan los impresionantes paisajes circundantes, que están conformados por colinas y montañas cubiertas de vegetación típica de la región andina.
La Laguna de Pomacanchis es un destino turístico ideal para aquellos que buscan escapar del bullicio de la ciudad y conectarse con la naturaleza. Los visitantes pueden disfrutar de momentos de relajación junto al agua, realizar paseos en bote o simplemente contemplar la belleza escénica que la rodea.
Esta es la segunda laguna del circuito y la menos conocida que otras en la región, lo que le otorga un ambiente más tranquilo y relajado. Es un destino perfecto para aquellos que buscan escapar del turismo masivo y conectarse con la paz y serenidad que ofrece la naturaleza andina.
La Laguna de Acopia es conocida por su impresionante entorno natural, con montañas cubiertas de vegetación que se reflejan en sus aguas cristalinas. El paisaje circundante es ideal para aquellos que disfrutan de caminatas y senderismo, ya que ofrece vistas panorámicas espectaculares.
La tercera laguna se llama Asnacocha, cuyo nombre proviene del quechua y significa 'laguna maloliente'. La razón detrás de su peculiar nombre radica en la proliferación de algas en sus aguas. Cuando estas algas son calentadas por el sol, desprenden un distintivo olor que impregna el ambiente con esta particular fragancia.
Ubicada a los pies de la laguna, se encuentra el pueblo de Mosoqllacta, situado a una altitud de 3,800 metros sobre el nivel del mar. Algunos visitantes que llegan a esta zona deciden acampar en las riberas de Asnacocha, teniendo así la oportunidad de apreciar de cerca la belleza y singularidad de esta laguna.
A pesar de su nombre, la Laguna Asnacocha atrae a aquellos que buscan una experiencia auténtica y en contacto con la naturaleza. Su entorno tranquilo y su peculiar fragancia proveniente de las algas la convierten en un destino interesante para los amantes de la exploración y los paisajes únicos.
La cuarta laguna del circuito es la más elevada (3,750 metros sobre el nivel del mar) y lleva por nombre Tungasuca o Pampamarca. Es un hábitat para una gran variedad de fauna silvestre, como parihuanas y patos, gracias a los extensos totorales que la rodean. La práctica de pesca deportiva es especialmente popular en Pampamarca, ya que es una laguna de agua dulce.
Además de su belleza natural y su riqueza en fauna, los alrededores de esta ruta ofrecen la oportunidad de recorrer en bicicletas de montaña. Así, los visitantes pueden disfrutar de un emocionante paseo por los escénicos paisajes y experimentar una conexión más cercana con la naturaleza de esta región montañosa.